Quizás poco conocida fuera de sus fronteras, la coreana Lee Tai-Young se convirtió en la primera mujer que se dedicó a la abogacía de manera profesional en su país, llegando a ser la primera mujer en ostentar el cargo de juez en Corea, y ayudando a las mujeres a mejorar su estatus jurídico en aquella época.
En el ámbito de la música, Google ha querido reconocer la labor de la cantante y activista sudafricana Miriam Makeba, que se convirtió —gracias a su talento musical— en una de las artistas más reconocidas de su país a finales de la década de los cincuenta. Sin embargo, la persecución en su país a causa del apartheid, la hizo emigrar a Estados Unidos. Y también ha querido destacar el papel de la bailarina y coreógrafa india Rukimini Devi, quien popularizó el Bharata Natyam, un baile tradicional indio. Ella y su marido fundaron la Academia Kalakshetra de danza y música en la ciudad de Chenai, al sur del país, en 1936.
Para acabar, Lina Bo Bardi, nacida en Italia en 1914, pasó gran parte de su vida en Brasil, y llegó a convertirse en una de las arquitectas más reconocidas del mundo, dejándonos algunos de los edificios más icónicos de Brasil, como el Museo de Arte de Sao Paulo.
La primera convocatoria del Día de la Mujer tuvo lugar en 1911 en algunos países europeos, como Alemania o Dinamarca, tras varios sucesos que pusieron de relieve las pésimas condiciones de trabajo de las mujeres. Uno de los sucesos más simbólicos, aunque no el único, se produjo el 25 de marzo de 1911, cuando unas 149 personas, la mayoría mujeres, murieron en el incendio de la fábrica Triangle Shirtwaist de Nueva York. Más de dos décadas después, en 1936, España también se adhirió a esta celebración, pero no fue hasta 1977 que se extendió al resto del mundo. Ese año la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proclamó el 8 de marzo como Día Internacional por los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional.
fuente: El Pais