Antes era un lugar famoso -plasmado en bellas fotografías- lo que inspiraba un viaje. Ahora, lo que motiva es la imagen de aquel lugar “cool” que se compartió en las redes sociales.
El “efecto snob” es un fenómeno descrito en la microeconomía como una situación en la que la demanda de cierto bien, por parte de individuos con un nivel de ingresos alto, está inversamente relacionada con su demanda por parte de aquellos con un nivel más bajo… Estos bienes suelen tener un alto valor económico, pero un bajo valor práctico.
Los lugares famosos son famosos por una razón. Son hermosos, místicos, tienen algún valor histórico o poseen una rica herencia cultural. Por ello, todos queremos visitarlos y tomarnos una foto como testigo de nuestra visita, así como muchos lo han hecho antes de nosotros.
Pero esto no es nuevo, basta solo con detenerse unos minutos ante cualquier estante de postales, álbum de fotos o frente a los posters en cualquier agencia de viajes y verás, con lujo de detalle, las imágenes de esos mismos lugares (con o sin gente), inspirando a viajar desde hace mucho tiempo. Mucho antes de que existiera Instagram, ¡la gente ha sostenido con sus manos la Torre inclinada de Pisa por más de 30 años!
La diferencia radica, hoy en día, en que muchas de nuestras fotos en lugares famosos ahora son públicas. Ya no se esconden en los álbumes de fotos familiares. Instagram se ha convertido en una lista de sitios de acceso público que NECESITAS visitar, lo que alimenta una actitud FOMO (Fear Of Missing Out). Pienso que, por ello, nos estamos esforzando en demasía en impresionar a todos con nuestra lista de lugares visitados. ¿El Taj Mahal, el Castillo de Chichén-Itzá o la Gran muralla china? Todos están palomeados. Y hasta conseguimos la T-shirt o el snow globe del sitio, pero sobre todo publicamos nuestra foto en Instagram para probarlo.
El pasatiempo de la fotografía ha crecido exponencialmente en los últimos años con cámaras digitales, teléfonos inteligentes y el intercambio de imágenes a través de las redes sociales. Esto significa que hay muchas más fotos de todo ahora. Se estima que en 2017 se tomaron 1,2 billones de fotos digitales. La fotografía se ha vuelto más accesible para todos y más personas. Todos, y hasta nuestros abuelos, están intentando acomodarse para obtener una imagen entrañable con su iPhone o iPad. Innumerables profesionales o amateurs, comparten videos instructivos gratuitos de YouTube en línea para sacar las mejores placas. ¡El mundo está más entusiasmado con la fotografía como nunca antes!
Si aún no me creen que las fotografías en las redes sociales tienen el poder de influir en las personas, les comparto aquí unos datos del nuevo informe de Fullscreen & Shareablee, que muestra lo poderoso que éstas son:
«Casi la mitad (42%) de 18-34 reporta haber probado un producto recomendado por un influencer, y más de una cuarta parte (26%) dice que en realidad ha realizado una compra basada en una recomendación de alguna figura del Internet».
Otro estudio realizado por la Universidad de Georgia, en EEUU, destaca el «efecto snob» que las redes sociales tienen en los viajes:
Algunas personas eligen sus destinos en función de las tendencias actuales, mientras que otras intentan ser «COOL» al elegir destinos que no son tan populares. De cualquier manera, las redes sociales están influenciando en sus decisiones.
Un ejemplo claro de esto es la ciudad de Wanaka, en Nueva Zelanda, que experimentó un aumento masivo del 14% en el turismo de la región cuando se enfocó en invitar a INFLUENCERS para dar a conocer sus atractivos. El resultado: superó con creces lo hecho antes con métodos tradicionales de marketing. ¿Cuál es el camino que debe seguir ahora? Es claro, seguir apostando por su promoción en medios digitales, principalmente a través de redes sociales.
Así pues, la próxima vez que estés planeando publicar una foto en la cuenta de Instagram oficial de tu marca, piensa si lo que buscas es un simple “LIKE” o el boost natural de una sencilla fotografía incluenciadora para que tus seguidores puedan tomar una decisión relevante para su próximo viaje.